El ex Director de la Cantera del Real Madrid y ex jugador del club blanco, Míchel, pidió desde el programa VEO Fútbol que se adelantaran las elecciones del club de Concha Espina, asegurando que "es un error que las elecciones sean en julio debido a que la actual junta directiva es cómplice de los fallos de Calderón".
Cree que la junta no está legitimada para dirigir al Real Madrid· Asegura que hay directivos que sobran · Nunca informó a la directiva de su trabajo
El ex Director de la Cantera del Real Madrid y ex jugador del club blanco, Míchel, fue crítico con la situación del conjunto blanco, del que aseguró que atraviesa una "crisis institucional que supera al entrenador o a la directiva" y pidió que se adelantaran los comicios debido a que "es un error que las elecciones sean en julio".
Debido a que para el ex futbolista la junta directiva que continúa en las oficinas del Santiago Bernabéu es "cómplice de la gestión de Ramón Calderón, debería abandonar porque no está legitimada para dirigir al Real Madrid". Tras todo lo ocurrido en la última semana, el invitado al programa VEO Fútbol, dirigido por Paco García Caridad, señaló que "deben entender que se han equivocado y se deben marchar", por lo que "habría que buscar, con asamblea o sin ella, unas elecciones".
Con el equipo de Ramón Calderón y con algunos de los que todavía continúan en la Casa Blanca, el ex entrenador del Castilla fue muy crítico, destapando para él, varias realidades. Por ejemplo, quiso señalar que la Junta Directiva se limitaba "a cuatro personas, el presidente y tres vicepresidentes" y añadió que durante la época en la que estuvo en el cuerpo técnico de Valdebebas, "se tomaron decisiones muy importantes sin la presencia de directivos".
Debido a esto, resalta que hay muchas personas que desde sus puestos tan solo se dedican a hacer daño al club, como por ejemplo "Miguel Ángel Arroyo y Gaspar Rosety". Del primero destacó que "se mueve muy bien como secundario, es el encargado de hacer todas las notas públicas y desde ahí, es culpable de muchos de los males del madridismo" y respecto al segundo, afirma que "su única función es llamar al presidente y comerle la oreja".
Al presidente ante el que dimitió como director de la cantera del Real Madrid, Míchel lo calificó como un "oportunista que le ha superado todo lo ocurrido y ha tenido diferentes compromisos pero muy pocos apoyos". Además, añadió que le pesó mucho "la manera en la que ganó las elecciones, donde no le respaldó una gran parte del madridismo".
Calderón fue un oportunista al que no respaldó el madridismo
En cuanto a los cambios que pretende hacer Vicente Boluda, señaló que los debería "haber hecho mucho antes, cuando entró en la junta directiva, ya que ahora no me creo que no se sepa nada de lo ocurrido".
Dando un paso hacia delante y dejando atrás la situación blanca, el ex técnico del Castilla afirmó que para "ser presidente del Madrid se necesita mucho dinero y contactos con políticos e instituciones", cerrando así la puerta a que él se presente con una candidatura y negando que alguien de la Quinta del Buitre se fuese a presentar, aunque reconoció que "Sanchís sería un gran gestor y trabajador y además, llenaría de ideas nuevas el club por su gran capacidad y conocimiento del madridismo".
"Nunca me reuní con la junta directiva"
Cambiando de tema, Míchel charló sobre su salida del conjunto blanco el pasado mes de diciembre, afirmando que "no fue porque eché atrás a un nieto de un personaje importante, sino que fue por un cúmulo de cosas, aunque llama la atención la inversión que se ha hecho en la cantera y los pocos resultados que se han sacado" y añadiendo que es "curioso que ningún jugador valga para el primer equipo y sí para muchos de la Liga española".
Otra de las cosas que criticó de Calderón fue que a él nunca la pidieron un informe ni le dijeron lo que tenía que hacer, sino que "yo hice una cantera como creía", ya que "tuve muy pocas reuniones con Mijatovic y tan solo me juntaba a veces con Carlso Bucero, algo que al final disminuyó considerablemente". A estas escasas reuniones, se sumaban las inexistentes reuniones con la Junta, destacando que "nunca me reuní con la directiva para contarles mi trabajo y jamás me lo pidieron".
Por último, se pronunció sobre la labor del Juande al frente del vestuario, destacando que "no se ha dejado llevar por la pasión, hace su trabajo y no el que le dicen que haga y además ha dotado al equipo de un sistema defensivo, con fuerza en el centro del campo y velocidad en el ataque".
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